Manuel de Lacunza y Díaz (1731-1801)

7 Junio, 2012 | por Dr. Daniel Jiménez Espinoza (MD), Las Condes (Santiago, Chile)

 

Manuel Lacunza y Díaz

SANTIAGO, Chile.  Recientemente una delegación adventista asistió al lanzamiento de un libro que investiga la obra de uno de los heraldos del movimiento adventista: el chileno Manuel de Lacunza y Díaz. En el auditorio de la Facultad de Teología de la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC), Santiago de Chile, el vicedecano de dicha facultad y profesor de Teología, Fredy Parra, presentó su más reciente trabajo: El Reino Que Ha De Venir: Historia y Esperanza en la obra de Manuel Lacunza.

En su exposición, Parra detalló aspectos signific,ativos del mensaje del jesuita chileno Manuel Lacunza (1731-1801), tales como la novedad de la Segunda venida, los significados de Fin del Siglo, la conciencia Apocalíptica, la incertidumbre del futuro, el tiempo nuevo anunciado y la definitiva intervención divina trasformadora del mundo; todos ellos con rasgos bastante propios del adventismo.

Parra explicó que para Lacunza la Segunda Venida del Mesías tiene sentido de historia y esperanza. “La inminencia del reino de Cristo implica una crítica de la situación actual. El talante profético-apocalíptico de Lacunza presiona a la historia para que se abra a la llegada de lo nuevo e inesperado. Es sumamente importante recordar esto en una época marcada por una conciencia sistémica de atemporalidad. Época que ha perdido su capacidad de esperar, soñar y desear grandes cosas. Una especie de universal resignación al predominio de lo fáctico. En la obra de Lacunza, la historia no solo tiene una finalidad, sin también un fin, una meta y un plazo".1

La iglesia adventista ha reconocido a Manuel Lacunza como uno de los heraldos del movimiento adventista, junto a Ignaz Lindl, Johann Bengel, Louis Gaussen, y los participantes2 de sesiones interdenominacionales de la Albury Park Prophetic Conference en Inglaterra entre 1826-1830. 2

En estas conferencias se analizó en profundidad la obra principal de Manuel Lacunza, La Venida del Mesías en Gloria y Magestad, traducida al inglés por Edward Irving. Las conclusiones sobre la misma se difundieron por Europa y Estados Unidos, llegando a influir el ambiente religioso de Guillermo Miller 3.

Los participantes de dichas conferencias promovieron la predicación de la Segunda Venida de Jesús, influyendo en los cuerpos doctrinarios de tres nuevas denominaciones protestantes: la Catholic Apostolic Church, los Plymouth Brethren y los Adventistas. Los herederos de estos movimientos son en la actualidad la New Apostolic Church (Iglesia Nueva Apostólica), con 10 millones de miembros, la Iglesia de los Hermanos (Christian Brethren Church, The Exclusive Brethren) con 1 millón de miembros y la Iglesia Adventista del Séptimo Día con 16 millones 4.

La conexión entre Lacunza y la Iglesia Adventista ha quedado sumamente demostrada por los trabajos de investigación históricos y teológicos de Alfred Felix Vaucher (1887-1993) y LeRoy Edwin Froom (1890-1974).

El aporte de Lacunza al estudio de las profecías de Daniel, Apocalipsis, y las interpretaciones sobre el milenio, el anticristo e Israel fueron notables. Lacunza deja a un lado interpretaciones católicas tradicionales y recurre a las Sagradas Escrituras como suficiente fuente para establecer que los puntos focales de todas las profecías bíblicas y los propósitos de toda la historia son las dos venidas de Cristo, identificando dos resurrecciones literales separadas por un intervalo de mil años. Del mismo modo se atreve a concluir que el falso profeta y el anticristo, no es una persona, sino una organización, la Roma apóstata, porque la Roma cristiana puede ser la gran ramera, porque es capaz de cometer fornicación con los reyes de la tierra. También establece que el Reino de Dios no es la Iglesia, y que Israel tendrá un rol triunfante especial antes de la Parusía y en el reino eterno. Lacunza procede a una exégesis bíblica literal, no alegórica para la interpretación de los símbolos. 5

En un escenario católico, llama la atención esta dedicación al estudio del sentido y significado de la proximidad de la Venida del Mesías, el Milenio y el juicio final de los malvados, sobretodo si se tiene en cuenta, primero que, en las cinco Conferencias Episcopales Latinoamericanas, CELAM, de Rio Janeiro 1955, Medellín 1968, Puebla 1979, Santo Domingo 1992 y Aparecida Brasil 2007, se guardó silencio respecto a la predicación de la Segunda Venida como tema de evangelización católica en Latinoamérica; y en segundo lugar, porque las interpretaciones de Apocalipsis y Daniel, propuestas por Lacunza, fueron ingresadas al Índice de la Sagrada Congregación según sentencia del 6 de septiembre de 1824: Prohibitum quocumque idiomate, y luego reafirmadas por la Suprema Congregación del Santo Oficio, el 21 de Julio de 1944. En ese momento, se dijo que el “milenarismo mitigado, es decir, el que enseña que Cristo Señor, antes del Juicio Final, previa o no a la resurrección de muchos justos, ha de venir visiblemente para reinar en la tierra [...] no puede enseñarse con seguridad.” ( http://iteadjmj.com/LIBROSP/DenziL.pdf)

En la historia cultural y religiosa nacional chilena, dominada desde siempre por el catolicismo, la influencia de Manuel Lacunza, ha tenido tres momentos según el autor O. Arce 6.

La primera etapa comprende desde 1800 a 1910 con la difusión, traducción y condenación de la obra de Lacunza. La segunda etapa transcurre entre 1910 a 1940, cuando se reanaliza la originalidad literaria e historicista de la obra de Lacunza, lo que deriva en un Lacunzismo chileno (milenaristas). Así es como Emilio Vaisse, un sacerdote católico publica en 1917 “El Lacunzismo”7, postulando que las tesis fundamentales de Lacunza son la Caída de la Iglesia Católica, la Restauración de la Sinagoga y el Reinado milenario del Mesías en Jerusalén. 7

El mismo sacerdote también destaca la clarividencia de la Iglesia Romana al poner en el Índice de los libros prohibidos la obra de M. Lacunza. Termina Vaisse diciendo en la pagina 85, “existe desde algún tiempo en Chile una secta milenarista protestante, llamada Adventista, fundada en Estados Unidos de Norte América. por Guillermo Miller, en la primera mitad del siglo pasado. El adventismo no parece tener relaciones con el lacunzismo”.

Cuando E. Vaisse escribe esto, en Chile, con una población de 3.500.000 habitantes, solamente había 725 adventistas en 18 congregaciones y cuatro pastores: dos expatriados, F. Perry y F. Westphal y dos nacionales, D. Soto y V. Thomann. Por lo tanto, Vaisse tenia escasas opciones para saber mas de los adventistas.

Las discusiones teológicas sobre el milenarismo y lacunzismo continuaron en el clero y universidades chilenas, lo que derivó en que el Cardenal José María Caro (1866-1958) de Chile llevara el asunto en consulta a Roma. Esto originó el dictamen del Santo Oficio del 14 Julio 1944 ya mencionado.

La tercera etapa se inaugura con la publicación del gran estudio efectuado por Alfred Felix Vaucher en 1941, “Une celebrité oubliée. Le P. Manuel Lacunza y Díaz”. Collonges-sous-Saléve: Fides, 1941. Este destacado trabajo impacta la escena nacional, impulsando el interés de la crítica sobre el tratamiento del tema apocalíptico de Lacunza, idea de sumo interés intelectual y colectivo a finales del siglo XX. Esta labor investigadora e interpretativa es continuada hasta hoy en día por varios estudiosos chilenos, entre ellos Freddy Parra.

La UNACH, ACES Chile y Aula7Activa.org, la editorial digital de la Asociación de Estudiantes y Graduados Adventistas de España (AEGUAE), también trabajan en la difusión del pensamiento y la figura de Manuel Lacunza. En breve publicarán la traducción al castellano de la mencionada obra de Vaucher, cuyo título será Una celebridad en el olvido. Este proyecto editorial, dirigido por el director de Aula7Activa.org y profesor en la UNACH, el Dr. Ramon C. Gelabert, de buen seguro que tendrá una gran repercusión en los ámbitos académicos y religiosos de Chile por lo menos.

Y es que es notable cómo el mensaje de Lacunza sigue teniendo espacio en el siglo XXI. Así es como Parra lideró la organización del Seminario Internacional sobre “Milenarismo, Mesianismo, Pensamiento utópico y Escatología” en homenaje a Manuel Lacunza en Septiembre 2002, conmemorando el bicentenario de su muerte, con la participación de las Facultades de Teología, de Historia y Geografía y de Ciencia Política de la PUC, la Universidad Alberto Hurtado y Universidad Andrés Bello, todas de Santiago de Chile. Tal Seminario convocó a académicos y expertos de Italia, España y Chile, cuyas ponencias, sobre “La historia del fin”, “América y el Apocalipsis en el siglo XVI”, “el milenarismo de Joaquín de Fiore”, “mesianismo y milenarismo desde la perspectiva judía”, “el milenio en la patrística”, y del mismo Parra “Historia y escatología en Manuel Lacunza: La temporalidad a través del milenarismo lacunziano”, fueron todas publicadas en el volumen 44 de Teología y Vida de 2003 8.

Con su último libro sobre Lacunza, Parra avanza en un esfuerzo vindicatorio del valor y oportunidad del mensaje de Manuel Lacunza, que inició en 1993 en su tesis doctoral de teología, en la Pontificia Facultad Jesuita de Teología y Filosofía de Belo Horizonte, Brasil. Desde entonces, en sucesivas publicaciones ha analizado la obra de Lacunza bajo miradas históricas y teológicas, tales como “El Reino que ha de venir”, “Historia y esperanza en la obra de Manuel Lacunza”, “El milenarismo y Manuel Lacunza”, “El fin del mundo según Lacunza”, “Manuel Lacunza: su obra y su visión de la historia”.

Su última obra, El Reino Que Ha De Venir: Historia y Esperanza en la obra de Manuel Lacunza, da inicio a la sección de Estudios de la Biblioteca Jesuita de Chile, de la Universidad (Jesuita) Alberto Hurtado de Chile. http://filosofiahumanidades.uahurtado.cl/?page_id=187.

En la presentación de dicha obra expusieron S. Fernández, director de publicaciones de la Facultad Teología de la PUC y C. Rolle, académico de la Facultad de Historia de la PUC. Luego, el mismo Parra, en sus agradecimientos a los presentes, destacó la presencia de académicos de la UNACH. En efecto, desde Chillán, a 400 km al sur de Santiago, viajaron el Pr M. Victoriano y el Dr. Gelabert de la UNACH. Esta presencia adventista se completó con el Pr F. Gutiérrez, del distrito de Talagante a 40 km de Santiago y quien suscribe, anciano de iglesia Las Condes, Santiago.

La conexión Adventista-Lacunza fue un buen tema para la conversación mantenida con Parra. Por su parte, un alumno de historia de la PUC, sacerdote católico, se nos acercó diciendo que lo último que habría esperado ver en el edificio de la Facultad de Teología de la PUC era a adventistas. Le preguntamos por qué y nos argumentó que en el canal de televisión Nuevo Tiempo y en libros adventistas se sataniza a la Iglesia Católica.

También conversamos con el Decano de Teología de la PUC, dándole detalles de la importante conexión histórica del mensaje de Lacunza con el adventismo actual. Él planteó la necesidad que la Facultad de Teología de la UNACH se integrara a las reuniones semestrales que tienen docentes de las Facultades de Teología católicas con Facultades de Teología evangélicas, donde exponen temas técnicos. Aclaramos ante él que propiciamos el diálogo interreligioso pero no el ecumenismo.

Quisiera concluir diciendo que mi interés personal en Lacunza se lo debo al Pastor Francisco Jiménez (1913-2004), mi padre, que entre 1950 y 1960, en todas las iglesias que pastoreaba, le escuché predicar la inminencia de la Parusía del Mesías basado en el cumplimiento profético bíblico y la argumentación histórica y teológica documentada en las obras de L.E. Froom y Vaucher. Ha pasado mucho tiempo desde entonces pero todavía hoy, La Venida del Mesías en Gloria y Magestad de Manuel Lacunza sigue teniendo actualidad en Chile.

[ La Pontificia Universidad Católica de Chile también informó sobre este evento.]

 
REFERENCIAS:


1 Parra F. “El Reino que ha de Venir: historia y esperanza en la obra de Manuel Lacunza”. Ediciones Alberto Hurtado. Santiago, Chile, 2011.

2 Hugh McNeile, Lord Mandeville, William Dodsworth, Tilson Marsh, Hartley Frere, Simons of Paul’s Cray, Haldane Stewart, William Cuninghame, Edward Irving, Joseph Wolff, C. S. Hawtrey, Edward Vaughan y Theodosia Howard (Lady Powerscourt)

3 Olivares, Sergio. “
Manuel Lacunza: La Conexión Adventista”. Diálogo, 1994, 6 (1), 12-15

4
http://www.nak.org/en/about-the-nac/, http://www.theexclusivebrethren.com/ , http://www.cggc.org/, www.adventist.org

5 Froom L.E. The Prophetic Faith of Our Fathers, Review and Herald Publishing Association. Washington D.C. 1946, Vol III, pag 304-305.

6 Arce O. “Manuel Lacunza y la Venida del Mesías en Gloria y: Bibliografía comentada”. Revista Chilena de Literatura. 2008, Número 73, 109 – 137.

7 Vaisse E. “El Lacunzismo”. Imprenta Universitaria, Santiago, Chile.1917.

ver en http://www.memoriachilena.cl/archivos2/pdfs/MC0012963.pdf

8 Teología y Vida. vol 44, 2003. http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_issuetoc&pid=0049-344920030002&lng=es&nrm=iso

 


OBRAS DE Y SOBRE MANUEL LACUNZA

 

Para profundizar en el pensamiento de Lacunza, aquí podemos ver su magna obra (sus 3 tomos publicados en 1812 - la Belgraniana de 1816 aun no se encuentra digitalizada) junto con otras obras de comentaristas relacionados:

 

 

1) Lacunza, Manuel. La Venida del Mesías en gloria y magestad (sic), tomo 1, Edición 1812 (partes 1-2)

 

2) Lacunza, Manuel. La Venida del Mesías en gloria y magestad, tomo 2, Edición 1812 (parte 3)

 

3) Lacunza, Manuel. La Venida del Mesías en gloria y magestad, tomo 3, Edición 1812 (parte 4)

 

OTROS AUTORES:

 

4) Urzúa, Miguel R. Las doctrinas del padre Manuel Lacunza contenidas en su obra 'La Venida del Mesías'

5) Parra, Fredy. Historia y escatología en Manuel Lacunza

6)

7) Journal of the Adventist Theological Society  (Volume 9, numbres 1 y 2 Spring Autumn 1998), "Lacunza´s Impact on Propehtic Studies and Modern Futurism". Artículo en PDF en inglés. 
8) Artículo: "
Manuel de Lacunza y Díaz (1731-1801), sigue vivo en Chile"
7 Junio, 2012 | por Dr. Daniel Jiménez Espinoza (MD)